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ORGAZ Y LOS CAMINOS

Viajeros ilustres


 

Sumario:
Personajes literarios
Personajes históricos
Un viaje particular: Isabel la Católica
Teresa de Jesús, la monja andarina
Restos de San Juan de la Cruz flecha movil
Raid de «los cristino»



El traslado de los restos mortales de San Juan de la Cruz .
Año 1593

 

Es verosímil que el traslado de los restos mortales de San Juan de la Cruz desde Úbeda hasta Segovia, se hiciera por el camino real de Córdoba a Madrid y por tanto la comitiva fúnebre tuvo que pasar por Orgaz. Aunque no hay protagonismo de Orgaz en este caso, la simple posibilidad del paso de la comitiva por Orgaz da pie a que conozcamos la extraña y curiosa peripecia que voy a relatar. Extraña y curiosa como tantos aspectos y episodios de la vida de este fraile que compaginó la mística con una acción.

En diciembre de 1591 San Juan de la Cruz cae enfermo en La Carolina cuando acababa de comenzar  un viaje que debía llevarle de Ubeda a Segovia. El enefermo es llevado de vuelta a Úbeda, donde muere  y es enterrado, pero inmediatamente se inicia una disputa entre Úbeda y Segovia por la posesión de sus restos. Dos años después los restos  se trasladan clandestinamente a Segovia, donde reposan actualmente.

 

 
Sepulcro de San Juan de la Cruz en Segovia

Fray Alonso de la Madre de Dios (+ 1635),  fraile de la Orden de los Carmelitas Descalzos, dejó descrito este traslado  en un manuscrito titulado  “Vida, virtudes y milagros del santo padre fray Juan de la Cruz, maestro y padre de la Reforma de la Orden de los descalzos de Nuestra Señora del Monte Carmelo” (1)

El traslado resultó un episodio bastante azaroso: los fundadores del convento de Segovia don Luis de Mercado y su hermana doña Ana de Peñalosa Mercado consiguieron autorización del Vicario para llevar los restos del santo a Segovia “con todo secreto, sin que se entendiese en el convento ni en la ciudad, desenterrasen el cuerpo del Siervo del Señor,  lo entregasen a las personas que mostrasen aquellas letras”.

El encargado de hacer el traslado fue Juan de Medina, Alguacil de la Corte,  quien acompañado de otras dos personas se trasladó al convento de Úbeda, donde abrieron el sepulcro y descubrieron que  el cuerpo que aún estaba incorrupto,  después de nueve meses del fallecimiento. Lo volvieron a enterrar en el mismo sitio con cal viva “para que se consumiese y gastase y esperar más tiempo para llevarlo”.

En abril de 1593, pasado un año, Juan de Medina volvió a Úbeda, “... y luego llegó al convento de los Carmelitas y presentó sus letras al padre  Superior (por estar ausente el Prior) y habiendo los dos señalado tiempo para desenterrar el deseado cuerpo, que fue dadas las once de aquella noche, para aquella hora, dejando Juan de Medina aparejadas las cabalgaduras para partirse en volviendo, con sus dos compañeros llegó al convento, dejando fuera a un cantón del convento a su pariente por espía de los que pasasen”. Se imponía el secreto y sigilo ante el temor de que conocido el traslado por los vecinos de Úbeda se opondrían a ello.

Y así comenzó el traslado tomando un camino algo más largo para despistar a posibles seguidores:

“Partió de Úbeda Juan de Medina Zeballos con el santo cuerpo, tan disimulado que nadie lo conociese lo que llevaban, dejando, por lo que pudiese suceder, el camino derecho de Madrid, tomó el de Jaén, que es del mismo obispado , iba aún con algún temor no le saliesen a impedir el paso y quitarle el santo cuerpo. Y enderezando, como él mismo me refirió, su camino de Jaén a Montilla, poco antes de Martos, entrado ya el día… Llegaron a Martos y a Montilla y desde allí por Córdoba continuaron su camino a Madrid”. 

El cortejo se dirigió  hacia Martos y Córdoba, casi en dirección opuesta a la que tenían que llevar. Y desde Córdoba se dirigió hacia Madrid pasando por el puente de Alcolea y la villa de Adamuz,  cruzando Sierra Morena y atravesando todo el  Valle de Alcudia, llegando a  Almodóvar del Campo y Malagón .

 


Verde: intinerario seguido en el traslado de los restos de San Juan.
Rojo: itinerario natural de Úbeda a Malagón.



A partir de Córdoba la comitiva se dirigió hacia Toledo siguiendo el Camino real de Sevilla a Toledo, que pasaba por Orgaz, como se refleja en el siguiente plano:

Camino real de Toledo a Córdoba y Sevilla
  Aumentar tamaño Mapa de los lugares y ventas cervantinos en el camino real de Toledo a Córdoba y Sevilla (2)
(Tramo de Toledo a Ciudad Real)

 

En resumen, los restos de San Juan de la Cruz siguieron un camino mucho más largo que,  como advertía fray Alonso de la Madre de Dios, evitó   que   los vecinos de Úbeda les siguieran, cuando a las pocas horas descubrieran que se habían llevado el cuerpo del santo a Segovia.

Algunos autores suponen que Cervantes se inspiró en este azaroso traslado de San Juan de la Cruz para escribir  la “aventura que le sucedió con un cuerpo muerto” a don Quijote y Sancho Panza, aunque esto sucediera en otro camino diferente a nuestro camino real de Toledo a Córdoba.

 

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(1) Alonso de la Madre de Dios : Vida, virtudes y milagros del santo padre fray Juan de la Cruz, maestro y padre de la Reforma de la Orden de los descalzos de Nuestra Señora del Monte Carmelo.-- Madrid: Editorial de Espiritualidad, 1989

(2)Tomado de ASTRANA MARIN, Luis: Vida ejemplar y heroica de Miguel de Cervantes Saavedra. Tomo IV,  Capítulo XLVI

 

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Creación: Enero 2014 / Última modificación: