La alabarda, para el Diccionario de la Real Academia, es "un arma antigua, que consta de una asta de madera y de una cuchilla transversal, aguda por un lado, y de figura de media luna, por el otro". Y el mismo diccionario dice que alabarderos eran "los soldados pertenecientes a un cuerpo especial de infantería que daba guardia de honor a los Reyes de España, y cuya arma distintiva era la alabarda".

En España  la alabarda estuvo en manos de los soldados de infantería desde el final de la Edad Media hasta que fue sustituida por el fusil en 1796. Pero ha perdurado como arma de parada hasta nuestros días e incluso existe una compañía de alabarderos  de la Guardia Real Española que la mantienen en su dotación.

En Orgaz, como en otros pueblos vecinos, ha pervivido hasta nuestros días un cuerpo de alabarderos que da guardia de honor no al rey, sino al Cristo del Olvido, patrono de Orgaz, con una característica muy especial, ya que se podría decir que sus alabardas han florecido, recubriendo las flores multicolores su cuchilla y aderezándose además con múltiples cintas de colores.

Cuenta la leyenda que este florecimiento de las alabardas tuvo un origen milagroso, ya que se produjo cuando una compañía de alabarderos reales se encontraba preparándose para entrar en batalla, justamente la noche anterior mientras dormían. Al despertar encontraron sus alabardas cubiertas de flores y ante tal prodigio, abandonando sus propósitos guerreros, la compañía fue  a rendir honores al patrón del pueblo que pretendían atacar, que era Orgaz.

Es evidente que esta soldadesca tiene un origen militar, posiblemente ligado a los reclutamientos que se llevaban a cabo para que los mozos de los pueblos fueran a servir al rey, teniendo un especial significado el baile de la bandera como una muestra de habilidad castrense.

Lo que no se explica muy bien es cómo esta soldadesca se liga al culto de las Ánimas del Purgatorio y a las imágenes que se veneran en los pueblos.

Las alabardas de Orgaz son un elemento esencial del folklore local, con gran tradición y muy arraigado entre sus gentes, que sienten cómo vibra su corazón cuando escuchan el redoble de los tambores y el sonido de los clarines por sus calles, y sienten una emoción especial al ver bailar la bandera. Son las alabardas una pieza esencial en desarrollo de las fiestas mayores en honor al Cristo del Olvido, cuya festividad se celebra el 25 de agosto.

		..............	Alabarda de la Compañía de Alabarderos de Orgaz .-- Foto: Santiago Gómez

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