«Gloria a Cristo» Himno al Cristo del Olvido
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Himno de las Benjaminas de Acción Católica
Benjaminas de la Parroquia,
emulas de Santa Ines,
seguid sendas de pureza
hasta morir o vencer.
A Cristo siempre seguiremos ´
en la vida parroquial,
con celo trabajaremos
por nuestro santo ideal.
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Jueves
santo
Jueves santo
no ayuné,
¡sabe Dios a donde iré!
Al corral de la montaña
a comer peras amargas,
membrillos amarillos,
y azufaifas coloradas.
Allí esta Pedro
Botero
con las uñas afiladas
pa sacarte la tajada
Rosario
de la aurora
Todos
los domingos de octubre los Hermanos del Santo Rosario celebran
una procesión al amanecer, y llevan la comunión
a los enfermos a su casa.
Antiguamente existía una Hermandad del mismo nombre (del Rosario de la Aurora). En los días en que se celebraba salían los cantores viejos a despertar a los hermanos. Cuando eran despertados obsequiaban a aquéllos con aguardiente. Mientras cantaban por las calles, los gañanes (principalmente) acudían a la ermita de la Virgen de la Concepción para recoger los faroles que eran tantos como avemarías y misterios (55), entre ellos cinco de mayor tamaño (los de los misterios que iban por el orden del rezo). Portaban, también, ocho faroles grandes y un bombo. Cantaban estrofas alusivas a la profesión del hermano: zapatero, sastre, albañil, gañán, etc.
Terminado el llamamiento, tenía lugar el Rosario litúrgico, recorriendo las calles del pueblo procesionalmente, al amanecer. En la procesión se canta así:
I
Al rosario de l’aurora tocan,
Levántate hermano,
vamos a rezar,
no perdamos lo que tanto vale,
por la conveniencia de no madrugar.
II
Labradores, que los campos vuestros
están padeciendo por la sequedad,
acudid al Santo Rosario,
si copiosas aguas queréis alcanzar.
III
En el nombre de la Virgen pura,
por aquí esta noche voy a principiar;
Despertar a todos los hermanos,
que el Santo Rosario vengáis a cantar.
IV
Sacristán, que descuidado duermes,
oye a los cantores que a tu puerta están,
y la Virgen te está esperando
porque su campana vayas a tocar.
V
Dios te salve, Carmelita hermosa,
que fuisteis esposa del casto José,
encerrada en un fuerte castigo,
disparando flechas contra Lucifer.
VI
El demonio, como es tan astuto,
tiró una pedrada y rompió un farol;
se enteraron los padres franciscos
y lo conjuraron en un callejón.
VII
Zapatero, que estás trabajando
de día y de noche a la luz del candil,
y te llaman para ir al Rosario;
dices que estas malo y no puedes ir.
VIII
Ah, si fuera una buena comedia,
ya te levantarás e hicieras por ir;
pero como es para ir al Rosario,
dices que estas malo y no puedes ir
IX
Hermano, qué dicha has tenido
que a tu misma puerta vengan a cantar
los hermanos del Santo Rosario
para que te olvides de tu enfermedad.
X
Al rosario de la Aurora tocan,
Con pitos y flautas, lenguas de marfil;
el que quiera gozar d’esta rosa,
vengase conmigo, que voy al jardín.
XI
Son saetas las avemarías
que a Lucifer causan herida mortal
y son llaves que el infierno cierran,
y el cielo nos abren para descansar.
Texto recogido en Orgaz por Bonifacio Gil en 1949. Ver "Canciones antiguas de Orgaz recopiladas por Bonifacio Gil García en 1949nº 41 ).
Una variante:
El demonio como es tan astuto
tiró una pedrada y rompió mi farol.
Le entrraron los padres franciscos
y lo conjuraron en un callejón.
Sábado
santo
En
los oficios del Sábado Santo, que antes del Concilio Vaticano
II se celebraban el sábado por la mañana temprano,
entre otras ceremonias, se bendecía el agua. Por la tarde
los particulares iban con recipientes como la lechera a recoger
agua a la iglesia y con ella bendecían todos los rincones
de la casa rociándolos con el agua, recitando a la vez
esta copla:
Agua bendita,
de Dios consagrada,
salva mi cuerpo
y limpia mi alma.
San Antón
La
fiesta de San Antón se celebraba con hogueras la noche
anterior, y con la bendición de los piensos y de animales
delante de la iglesia. Después se daban las tres "vueltas
de San Antón" (por las calles Barruelo, el Muro, La Campana,
Alonso del Pozo ), y se hacía un concurso de bestias (
enjaezamiento, esquilado, etc.). Con motivo de la fiesta se cantaba:
San Antón, como
era viejo
tenia barbas de conejo,
y su abuela Catalina
las tenía de gallina.
Y su abuelo Melitón
las tenía de capón.
La Virgen del Socorro 1
La Virgen del Socorro
fue aparecida;
que la trajo un arriero
de Andalucía.
La Virgen del Socorro 2
La Virgen del Socorro
tiene tres velos;
y en quitándole uno
se ven los cielos.
La Virgen del Socorro
es chiquitita,
desde lejos parece
mariposita.
La Virgen del Socorro
tiene manillas,
y detrás de la puerta
sus campanillas
)
La Virgen del Socorro 4
Orgaz está en un barranco,
el Cristo del Olvido en medio,
y la Virgen del Socorro
a las afueras del pueblo.
La Virgen del Socorro 5
La Virgen del Socorro
tiene manillas,
y detrás de la puerta
sus campanillas.
San Bartolomé y las tormentas
Cuenta Antonio García Hinojosa Santa Cruz, que debe contar unos 90 años, conocido como "Cobisa", cuenta que su madre recitaba lo siguiente cuando había tormenta:
San Bartolomé madrugó y veló,
pies y manos se lavó.
Se encontró con Jesucristo
y le dijo: ¿Dónde vas, Bartolomé?
Señor, contigo me iré.
Vuélvete, Bartolomé
a tu puerta y tu mesón
que yo te daré un don.
Donde seas mentado
no caiga piedra ni rayo
ni mujer muera de parto
ni criaturas de espantos
ni hombre sin confesión.
Kirieleisón, Kirieleisón y un Padrenuestro.
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(1) Tomado de MORALEDA Y ESTEBAN, Juan: Literatura popular. Mas cantares populares toledanos.— En Annales de la Faculté des lettres de Bordeaux et des universités du Midi. Bulletin hispanique. Vol. IV, nº 3, 1902, pp. 261
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